Cualquier maestro se complace en trabajar con un estudiante que está interesado en sus éxitos y busca mejorar los resultados obtenidos. Sin embargo, casi todos los niños tienen un período en el que quieren abandonar las clases de música.
En la mayoría de los casos, esto se observa en 4-5 años de estudio. A menudo, la situación se ve agravada por la actitud de los padres que con mucho gusto descargan la culpa de sus hijos sobre el maestro "incompetente".
Para entender al niño
A veces vale la pena recordar que un estudiante está lejos de ser un adulto en miniatura. Todavía no puede entender y apreciar completamente lo que le está sucediendo. Y hay una inyección gradual en la edad adulta, lo que inevitablemente conlleva ciertas responsabilidades.
En general, hasta este punto, todos estaban jugando con el niño, ajustándose a sus deseos y no particularmente cargando. Ahora las demandas han comenzado. La carga y el volumen de tareas en una escuela integral aumentaron. Se agregaron lecciones adicionales en la música de la escuela. Y el programa en sí se vuelve más difícil. Necesita más tiempo para gastar en la herramienta. Se espera que el estudiante mejore la técnica del juego, y el repertorio de obras también es complicado.
Todo esto es nuevo para el niño y cae sobre él con una carga inesperada. Y esta carga le parece muy pesada. Eso está aumentando gradualmente la rebelión interna. Dependiendo del temperamento del estudiante, puede tomar diferentes formas. Desde la negligencia en el desempeño de la tarea hasta el conflicto directo con el maestro.
Contacto con los padres
Para evitar conflictos con los padres de los estudiantes en el futuro, será sabio decir desde el principio que un día el joven músico declarará que no quiere seguir estudiando, que está aburrido de todo y que no quiere ver el instrumento. También les aseguro que este período es corto.
De todos modos, durante tus estudios, intenta mantener un contacto directo con ellos. Al ver su interés, estarán más tranquilos para su hijo y no se apresurarán a cuestionar su profesionalismo en caso de un período problemático agudo.
La alabanza inspira
¿Qué pasos prácticos concretos pueden ayudar a despertar el entusiasmo en el estudiante?
- No ignore el principio de la apatía. De hecho, los padres deberían involucrarse más en esto, pero la realidad es que con gusto le brindarán un sentido del estado de ánimo y la condición del niño.
- Asegúrele al niño que otros han pasado por lo mismo. Si es apropiado, comparta sus propias experiencias o cite como ejemplos a otros estudiantes o incluso a músicos a quienes admira.
- Si es posible, permita que el alumno participe en la selección del repertorio. Después de todo, para estudiar las obras que le gustaban mucho más excitantes.
- Enfatice lo que ya ha logrado y anímelo, ya que con un poco de esfuerzo logrará mayores alturas.
- Y no olvide marcar no solo los puntos que deben corregirse, sino también aquellos que hizo bien.
Estas acciones simples salvarán sus nervios y apoyarán a su pupila.
Deja Tu Comentario